¿Qué es el Patrimonio Mundial?
El Patrimonio es el legado que hemos recibido del pasado, lo que vivimos en el presente y lo que transmitimos a las generaciones futuras. Todos los países poseen Sitios y Monumentos de interés local o nacional, pero para que este «patrimonio nacional» sea considerado también «patrimonio mundial» tiene que poseer un «Valor Universal Excepcional» (VUE); es decir, que tenga una importancia cultural o natural tan extraordinaria que transcienda las fronteras del país, poseyendo un especial significado para la Historia de la Humanidad.
La UNESCO, mediante la celebración en Paris de la «Convención sobre la protección del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural» de 1972, fijó las bases para su protección mediante la creación de la Lista de Patrimonio Mundial.
España cuenta con 48 bienes, naturales y culturales, declarados Patrimonio Mundial y 20 reconocidos como Patrimonio Inmaterial. Es, tras Italia y China (empatados con 55 bienes), el tercer país con mayor número de bienes incluidos en la Lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO.

Patrimonio Mundial en Granada
En Granada el Patrimonio Mundial está representado por la «Alhambra, el Generalife y el Albaicín». Fue en 1984 cuando se inscribió la Alhambra y el Generalife, siendo el primero de los 5 primeros monumentos españoles en ser declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO. Diez años más tarde, en 1994, un equipo internacional de técnicos de la UNESCO visitó el Albaicín para evaluar in situ la candidatura del barrio a ser incluido en la Lista del Patrimonio Mundial. El Comité del Patrimonio Mundial, en sesión celebrada el 17 de diciembre de 1994, aprobó por unanimidad la propuesta de incluir al barrio del Albaicín en la Lita de Patrimonio Mundial, como extensión del bien ya inscrito «Alhambra y Generalife», dándose una ampliación sustancial del bien protegido, que desde entonces pasó a estar compuesto por dos de las cuatro áreas en que se encentra sectorizado el Conjunto Histórico Declarado de Granada.
Como ya hemos dicho, para que un Sitio o Monumento sea incluido en la Lista del Patrimonio Mundial por la UNESCO tiene que poseer un Valor Universal Excepcional (VUE). Y este VUE se justifica mediante el cumplimiento de, al menos, alguno de los 10 criterios de selección establecidos por el Comité del Patrimonio Mundial en la «Directrices Prácticas para la aplicación de la Convención del Patrimonio Mundial». Son criterios de carácter cualitativo y sirven para evaluar el VUE.
Además de cumplir con alguno de estos criterios de evaluación, todos los bienes propuestos para formar parte de la Lista de Patrimonio Mundial deben cumplir tres requisitos obligatorios:
- En el caso de los bienes propuestos bajo los criterios 1 al 6, éstos deben cumplir en su concepción, materiales y ejecución con el principio de autenticidad. Con ello se persigue evitar las reconstrucciones que no estén apoyadas en documentación científica del original. Esta autenticidad se puede medir a través de los atributos que conforman el valor cultural del bien (forma, diseño, materiales, entorno, …)
- La integridad, que no es otra cosa que evaluar el estado de conservación del bien y sus atributos en relación con otros bienes semejantes del mismo periodo. En los bienes culturales esto se refiere al material físico del bien y/o sus características significativas, mientras que para los bienes naturales atañe a los procesos biofísicos y las características de la tierra. Tanto es así que la propuesta de inscripción debe ir acompañada de una declaración de integridad.
- Contar con una protección jurídica y unos mecanismos de gestión reglamentados, ya sean institucionales o tradicionales.
En el caso Granada, todos estos requisitos se cumplen y los criterios por los que fue incluida la Alhambra y el Generalife en 1984 y por tanto justificado su VUE, fueron los criterios I, III y IV: por representar la Alhambra, junto con los jardines del Generalife, una realización artística única; y constituir un extraordinario ejemplo arquitectónico que ilustra la etapa islámica en España.
Diez años más tarde, la ampliación del Sitio al barrio del Albaicín se justificó bajo el criterio IV, por conservar tanto la fisonomía urbana original como diversas construcciones medievales. En este sentido, el Comité expresó el deseo, ya apuntado por las autoridades españolas, de que una amplia protección de la zona asegurase el que su entorno visual no fuera dañado por construcciones modernas.
El conjunto que forma parte del Patrimonio Mundial comprende la Alhambra (siglos XIII-XIV), que incluye a su vez los jardines del Generalife (siglo XIV), y el barrio del Albaicín (siglos XI-XVIII, principalmente). Las dependencias de la Alhambra se dividen en los Palacios Nazaríes, la Alcazaba (su parte militar y más antigua), la Medina (compuesta por restos arqueológicos y jardines) y el Palacio de Carlos V, que alberga el Museo de la Alhambra y el Museo de Bellas Artes. A todo esto hay que sumar la dehesa del Generalife.
Por su parte, el Albaicín es un barrio residencial de la ciudad desde el que se divisa la Alhambra, en el que todavía quedan restos de la muralla árabe, así como de las diferentes puertas como la puerta Elvira o algún palacete islámico. En el Albaicín se fusiona el entramado urbano islámico y sus edificios conservados con la arquitectura civil y religiosa del renacimiento y del barroco, dando al conjunto una singularidad única.
También la importancia de Granada como ciudad, desde el punto de vista histórico, es consecuencia del declive que sufrió el Califato de Córdoba a finales del siglo X, con lo que se convierte en la capital musulmana más importante de al-Andalus hasta 1492. El Albaicín fue corte de los monarcas Ziríes en el siglo XI y se considera el último reducto musulmán antes de ser expulsados totalmente de Granada sus últimos moradores islámicos, los moriscos.
Por último, es importante tener en cuenta el marco físico de la ciudad de Granada, en el que se halla situado el Sitio Patrimonio Mundial. Ubicada al Este de Andalucía, posee una diversidad geográfica admirable, pues dispone de costa (Motril) y montaña (Sierra Nevada, con el Mulhacén como pico más alto de la Península Ibérica), y se ubica sobre dos colinas. La ciudad está atravesada por tres ríos y, concretamente, en la parte alta del río Darro se ubican la Alhambra y el Generalife en una colina; y el Albaicín en la colina de enfrente, derramando sus calles hacia el encuentro con ellos.
No en vano, hay que recordar que el Sitio Patrimonio Mundial con mayor extensión declarado en España es el «Alhambra, Generalife y Albaicín».
Todos los años, la Alhambra y el Albaicín (#UnidosPorElPatrimonio) se unen para conmemorar tan importante efeméride como fue la firma en París de la Convención de Patrimonio Mundial Cultural y Natural, el 16 de noviembre de 1972. Todos los años, ese día y los del fin de semana más próximos, El Ayuntamiento de Granada –a través de su Agencia Albaicín– y el Patronato de la Alhambra y el Generalife celebramos el Día Internacional del Patrimonio Mundial, con un amplio programa de actividades culturales gratuitas por toda la ciudad y para los públicos.
Otras inscripciones de la UNESCO en Granada
Además de la Lista del Patrimonio Mundial, la UNESCO cuenta con otros instrumentos de protección o Inscripciones Universales que afectan al reconocimiento de la riqueza patrimonial cultural y natural de Granada como ciudad, como son las declaraciones del «Flamenco» como Patrimonio Cultural Inmaterial, o la de «Granada. Ciudad de la Literatura» como Ciudades Creativas.
Otras declaraciones que otorga la UNESCO y que contribuye al reconocimiento patrimonial de Granada como provincia, son las inscripciones de las «Capitulaciones de Santa Fe (1492)» en el Programa Memoria del Mundo, la declaración de «Sierra Nevada» como Reserva de la Biosfera, o el reconocimiento como tal del «Geoparque de Granada», en la zona del Altiplano.